Aroma de Cristo?

¿AROMA DE CRISTO?

En un viaje en automóvil, junto con mi esposa y mi mamá (todos cristianos) de noche, estábamos compartiendo apasionadamente las maravillas que ha hecho El Señor en nuestras vidas y en las personas que nos rodean, cuando de pronto fuimos detenidos en un punto de control, el guardia se acerca a la ventanilla del vehículo y amablemente dice: “Buenas noches ¿Cómo están ustedes?” en una voz muy baja, ninguno escucho con claridad lo que él había dicho y contestamos los tres casi al unísono: ¿Queeééé? Con un acento casi retador, el guardia repitió con amabilidad: ¿Cómo están ustedes? Y todos contestamos: ¡Bieeeéén! Podría decir que fue una respuesta de mala gana, subimos la ventanilla y seguimos el viaje, enseguida yo me pregunte: ¿estoy destilando el aroma de Cristo?, ¡Claro que no! Esta situación me hizo reflexionar, ¿Como está siendo mi actitud ante las personas que Dios coloca frente ami?, a veces vienen personas y se acercan amablemente a mí, pero por estar preocupado solo por mis asuntos, les doy una mala respuesta o no les presto la debida atención, y tal vez las estoy hiriendo sin darme cuenta, lo más seguro es que esté maltratando a personas que están muy cerca de mí… miesposa, mis hijos, mis familiares, mis amigos, etc. Debemos entonces, analizar detalladamente cómo es nuestra actitud ante todas las personas, no tratando de esconder los errores de nosotros mismos, sino, exponerlos ante La Luz de Dios, ósea, confesarlos ante Dios.
Prov: 15:21: La necedad es alegría al falto de entendimiento: Mas el hombre entendido enderezará su proceder.
Otra interrogante que me hice fue: ¿Si de esta manera respondo cuando se acercan amablemente hacia mí, como responderé cuando se acerque alguien alterado?, Dios en Su Palabra nos da respuestas a estas situaciones:
Prov: 15:1: La blanda respuesta quita la ira: Mas la palabra áspera hace subir el furor.
Es impresionante descubrir que nuestras malas respuestas, muchas veces se convierten en verdaderos asesinos, si así es, en ASESINOS, con nuestras respuestas matamos sueños, matamos ilusiones, matamos relaciones familiares, matamos amistades, matamos nuestro futuro, nuestras malas respuestas matan EL AMOR.
Santiago: 3:5: Así también, la lengua es un miembro pequeño, y se gloría de grandes cosas. He aquí, un pequeño fuego ¡cuán grande bosque enciende!
Hermanos, reflexionemos en como estamos respondiendo ante todos, no solo con nuestras palabras, sino, con nuestros gestos y actitudes, dispongamos nuestro carácter y la totalidad de nuestra vida para ser imagen de Cristo, así como El lo hizo por nosotros, esforcémonos en frenar nuestras malas respuestas y veamos el día cuando nuestro ser despida solo el aroma de Cristo.
Efesios: 5:2: Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó á sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio á Dios en olor suave.

By FRANCISCO JAVIER BUSTILLOS